UN VIERNES CON ISRAEL

Viernes, siete de la tarde. Me preparaba algo de comer cuando de pronto como un impulso tome el telefono y marque el numero de Israel. Suena un par de veces y contesta. Se sorprendio de escuchar mi voz. Y en ese instante yo tambien me sorprendi de mi accion, trate de ser lo mas natural posible... platicamos dos cosas y me dice: -hoy voy a salir a tomar unas cervezas con un amigo... (por un instante me quedo sin palabras y sorprendido pienso... Israel casi no toma... Israel casi no tiene amigos... )
... ah¡ Voy a ir al bar donde fuimos la primera vez que salimos. ¿Quieres venir? Voy con Felipe (su amigo del gym, el que se golpeo con las mancuernas)

Sentados los tres platicando y riendo a carcajadas como tres alegres compadres... pasamos una noche genial. Israel dijo algunos comentarios con respecto a su amigo que me abrieron los ojos y darme cuenta de su principal y mas fuerte defecto. Israel es soberbio. Y por la misma soberbia no acepta ceder un poco ante su orgullo desmedido. Me di cuenta que Israel nunca me llamara para invitarme a salir. Dentro de su mente eso es imposible. Y me di cuenta que Israel nunca sintio nada por mi, estaba enamorado de la forma en que yo lo enamoraba mas de si mismo. No puedo creer que alguien sea tan egolatra de preferir seguir amándose a si mismo antes que permitir que alguien lo ame.